Hoy nos toca madrugar para ir en tren a nuestro siguiente destino: Xian. El tren pasa por Pingyao a las 8:40 así que a las 7:00 bajamos a desayunar de nuevo el desayuno chino y a las 7:30 nuestro chofer no está esperando en la puerta del hotel. Llegamos en unos 20 minutos a la estación rápida (es una estación diferente a la de trenes locales que es a la que llegamos), y a las 13:00 ya estamos en Xian.
En la estación de Xian nos recoge nuestra siguiente guía: Rocío (Su nombre español, claro). Lo primero que hacemos al llegar a la ciudad es hacer el check-in en el hotel: Eastern House Boutique Hotel. Es un hotel nuevo, moderno, elegante, cerca del centro de la ciudad, y al haberlo cogido con tanta anticipación (casi 3 meses antes) nos costó 73€ la noche. En el hotel tienen todos los días a las 14:00 un almuerzo gratuito para los clientes con café, infusiones, y un montón de pastelitos y galletas, todos muy buenos.
Tenemos la tarde libre así que después de reponer fuerzas nos dirigimos al Templo del dios de la ciudad. Es un templo pequeño, menos turístico que los que hemos visto en otras ciudades, y en el acceso al templo hay varias tiendas orientadas a los fieles para comprar todo tipo de amuletos e inciensos.
Cerca del templo se encuentra el barrio musulmán. No tiene perdida: está lleno de tiendas de alimentación, de comida ya cocinada, de gente y de mucho ruido.
En el interior del barrio musulmán se encuentra la Gran mezquita de Xian. Nos costó muchísimo encontrarla, ya que el acceso es a través de unos pasillos comerciales y no hay ninguna indicación (Os dejamos en el mapa al final del post la ubicación exacta de la entrada). Es una de las mezquitas más antiguas y mejor conservadas de China, y el interior es bastante amplio, con bonitas pagodas y salones de madera intercalados entre cuidados jardines. Un remanso de paz dentro de la bulliciosa Xian.
Al inicio del barrio musulmán se encuentran las torres del tambor y de la campana. El precio del ticket de acceso a cada torre por separado son 35¥ y la entrada combinada 50¥. Ambas tienen su encanto, la torre de la campana se encuentra justo en el centro de la ciudad, en el cruce entre dos de las principales calles de la parte antigua de Xian así que lo mas interesante es subir a lo alto y ver en 360º la cantidad de coches que cruzan la rotonda. La torre del tambor también es muy interesante porque en ella se encuentra el gran tambor que se tocaba al final de cada día cuando la torre estaba en funcionamiento, y una exposición al aire libre con varios tambores, alguno de ellos con miles de años de antigüedad.
Para cenar nos dejamos aconsejar por las recomendaciones de Rocío, nuestra guía de China Highlights, y fuimos a De Fa Chang, un restaurante del gobierno donde sirven dumplings moldeados con las formas de los alimentos que llevan en su interior: pato, flor de loto, nuez, etc… En el restaurante no hablaban ni gota de inglés, así que Rocío nos escribió una nota en chino donde indicaba que queríamos un “Banquete de dumplings” (así es como se llama a esta especie de menú degustación de dumplings). Entregamos el papel, y comenzaron a llegar los entrantes (sopa y varios entrantes fríos) y un montón de dumplings uno detrás de otro.
Lo más curioso es ver cómo cada dumpling tiene una forma totalmente diferente, pero la verdad es que el sabor no era nada especial, así que si lo preferís podéis asomaros a la entrada del restaurante, donde tienen expuestos varios dumplings (incluso mas bonitos que los que nos sirvieron), y así podéis disfrutar de estas obras de arte pero después cenar en otro sitio.